Alfonso III, hijo y sucesor de Pedro III, después de haber arrebatado a su tío la isla de Mallorca, estando en Huesca en octubre de 1286 hizo un llamamiento a sus súbditos, convocándoles para emprender la conquista de Menorca,

para la que escribió a los prelados, avisó a los próceres, exigió deudas de particulares, ordenó pagos a las aljamas y pidió préstamos sobre sus bienes. Las universidades de Barcelona, Tortosa y Mallorca prestaron sus galeras. se prohibió que salieran de los puertos de Cullera y valencia embarcaciones de tráfico hasta haber equipado la armada.

Guillermo de Santcliment, encargado de los aprestos de la flota, tenía listas para entregarlas en Salou 43 galeras, más taridas, xelandrias, burcias y otros barcos de transporte. En total, unas 122 velas de toda clase y condición:
- El arzobispo y la ciudad de Tarragona: 5 galeras guarnecidas.
- La ciudad de Barcelona: 15 galeras con gente.
- Tortosa y su obispo: 5 galeras y 5 barcas armadas, 100 ballesteros, 100 escuderos.
- El cabildo y ciudad de Mallorca: 10 entre naves y galeras, 5 taridas, 260 hombres.
- Otras ciudades, villas y particulares, diferentes socorros.

La expedición compuesta de unos efectivos desmesurados salió de Salou el 22 de noviembre, dirigiéndose a Mallorca, en donde permaneció hasta después de Navidad en que tomó rumbo a Menorca. La operación fue únicamente de transporte, al no haber ninguna oposición naval durante la travesía.

Una tempestad dispersó la escuadra cuando se hallaba a la altura del cabo de Artrutx, pero una parte de ella logró reagruparse en Portopetro y entrar finalmente en el puerto de Mahón, en el que ocuparon uno de sus islotes, llamado después Isla del Rey.
El 17 de enero de 1287 desembarcó el monarca con su ejército y en las inmediaciones del puerto. El rey peleó valerosamente al frente de los suyos hasta vencer a los que habían traicionado a su padre. Se apoderó del castillo y pueblo de Mahón, mientras que los moros vencidos se habían retirado al castillo roquero de Santa Águeda.
Tras conquistar la isla, en 1287 se levantó una atarazana en Ciudadela y se estableció para Menorca el derecho de construcción para naves de una o dos cubiertas de más de 700 quintales. Una de las leyes más notables dictadas por Alfonso III fue la del “pecio”, que acababa con los derechos del señor de la costa y ordenaba que nadie se aprovechara de los despojos, los cuales deberían ser restituidos a sus dueños; y mientras la pertenencia no se evidenciase, quedaba encargado.
Bibliografía consultada:
- Revista General de Marina
- La construcción naval en la Corona de Aragón. Francisco Fernández Gonzalez.
- Historia Marítima Española. Francisco Javier Oubiña Oubiña.
- Enciclopedia General del Mar.
- Wikipedia. https://es.wikipedia.org.
- https://www.pinterest.es
- http://armada.mde.es/ArmadaPortal/page/Portal/ArmadaEspannola/conocenos_historia.
- Diversos foros como:
- foro.todoavante.es
- foro.todoababor.es
- https://foronaval.com
- https://blogcatedranaval.com
- spanishnavalhistory.blogspot.com
- https://vadebarcos.net
- http://www.mapasilustrados.com
- http://www.hispanismo.org
- http://www.navalaction.com